Si queremos llevar a cabo un proyecto de obra civil o de edificación, seguro que ya sabes que necesitas un estudio geotécnico. Pero, ¿qué es este tipo de estudios y para qué sirve? Nosotros te contamos todo lo que debes saber.
¿Qué es un estudio geotécnico?
El estudio geotécnico es un estudio preliminar que se caracteriza por ser la base sobre la que cualquier proyecto de edificación o de obra civil deberá apoyarse. Su objetivo final es garantizar que el terreno podrá soportar la edificación y que esta no tendrá inestabilidades futuras.
Su realización nos permitirá conocer las características del terreno. Y, por lo tanto, podremos entender cuál será su comportamiento. Por ello, el estudio geotécnico resulta imprescindible, independientemente de las características de la edificación que vayamos a edificar. Cualquier tipo de obra, ya sea de pequeño tamaño como la construcción de edificios de tamaño considerable, necesitará de este estudio. Al igual que las rehabilitaciones de grandes edificios, o el diseño y ejecución de estaciones de tren subterráneas, por poner varios ejemplos.
El estudio geotécnico será un componente obligatorio de cualquier proyecto, más aún si tenemos en cuenta los objetivos de este. Es decir: garantizar la seguridad y la funcionalidad de la estructura que se vaya a edificar o sobre la que se vaya a intervenir.
Regulación y normativa de los estudios geotécnicos en España
Previamente a la ejecución de cualquier proyecto de obra civil o edificación, tendremos que realizar una serie de estudios. Entre ellos, el estudio geotécnico. Cuya obligatoriedad se encuentra establecida en el Código Técnico de la Edificación (RD 314/2006).
Este será el marco legislativo que determinará las exigencias mínimas que deben cumplir las edificaciones en relación con los requisitos básicos de seguridad y habitabilidad. Será en el documento básico (DB-SE-C) donde se definan las cuestiones concernientes a los estudios geotécnicos. Así como las responsabilidades de las diferentes partes implicadas en el proceso de edificación.
El CTE define el estudio geotécnico como «el compendio de información cuantificada en cuanto a las características del terreno en relación con el tipo de edificio previsto y el entorno donde se ubica, que es necesaria para proceder al análisis y dimensionado de los cimientos de este u otras obras».
De hecho, con la información que nos brinda el estudio geotécnico, podremos definir, entre otros aspectos, cuáles son las cimentaciones más adecuadas. Algo que se deberá diseñar teniendo en cuenta lo siguiente:
- Las características de la edificación o ejecución de obra civil.
- Las características del terreno donde se va a asentar la construcción.
En definitiva, un estudio geotécnico es aquel conjunto de actividades que nos van a permitir determinar y conocer las propiedades de un terreno. Y, la información que aporta resultará imprescindible para que se definan tanto el tipo de cimentación como las características de la futura construcción.
¿Cómo se desarrolla un estudio geotécnico?
Cuando se realiza un estudio geotécnico, este puede tener ligeras variantes dependiendo del tipo de proyecto. Pero, podemos definir tres partes que son comunes a todos los estudios geotécnicos:
Trabajo de campo
Esta etapa se encuentra comprendida por la visita al terreno realizada por el técnico especializado. El objetivo será analizar y estudiar todas las variables, como la topografía del terreno, presencia de agua o de taludes. Así, obtendremos una visión global del lugar, definiendo las condiciones geotécnicas en el informe final.
Para realizar el trabajo de campo, las principales técnicas que se aplican son:
- Calicata: Se trata de excavaciones en forma de zanjas o pozos que nos permitirán acceder al terreno con el objetivo de obtener muestras de este para efectuar ensayos. Los resultados obtenidos se registran en estadillos en los cuales se anota la profundidad, descripción litológica y presencia de filtraciones. Y se adjuntan fotografías tomadas en el sitio.
- Penetrómetros: Una de las técnicas de ensayos de penetración utilizada de manera más recurrente para realizar un reconocimiento geotécnico. Podemos aplicar diversos ensayos de penetración, como los estáticos, que se caracterizan porque van penetrando el terreno de manera continua y los dinámicos, que permiten penetrar el terreno a golpes.
- Sondeos: Con esta técnica se perforará el terreno con una sonda cilíndrica. El objetivo es recopilar muestras y saber el tipo de terreno que se ubica en el lugar según la profundidad. Con la utilización de esta técnica también se podrá determinar la presencia de agua. La información obtenida con los sondeos nos permitirá elaborar la columna estratigráfica, donde se describe la ubicación vertical de unidades de roca en un área determinada.
- Ensayos SPT: Este es un tipo de ensayo de golpeo que contabiliza el número de golpes que se necesitan para introducir una toma de muestras tubular. Este ensayo nos permitirá conocer la resistencia del terreno a dicha profundidad.
Trabajo de gabinete o laboratorio
Cuando ya tengamos las muestras recogidas in situ, las llevaremos a un laboratorio para que se puedan efectuar ensayos. Pruebas que serán distintas según los requerimientos del proyecto. Tendremos que definir nuestras necesidades en la primera fase o en la segunda fase del estudio geotécnico. Ello debido a que, es aquí cuando conoces de manera clara el tipo de material sobre el cual vamos a trabajar.
- Análisis químico: Este ensayo se realiza para detectar los componentes químicos que puedan ser agresivos o dañinos para las cimentaciones. Por lo general, se realiza para buscar la presencia de sulfatos o cloro. Así como para conocer el grado de acidez del suelo, con el objetivo de determinar las características del hormigón que se debe utilizar para la cimentación.
- Caracterización: Este ensayo nos va permitir establecer la granulometría del suelo. Esto quiere decir que gracias a este ensayo podremos saber el porcentaje de los distintos tamaños de árido del terreno. Así como la plasticidad, la densidad aparente y real y otras cualidades del suelo.
- Ensayos mecánicos: Con estos ensayos podremos conocer la capacidad de resistencia del suelo, así como la rigidez del material del terreno. Los ensayos mecánicos se aplican para materiales como arcillas, para conocer las propiedades mecánicas del suelo.
Informe Final
Una vez realizados, tanto el trabajo de campo como el trabajo de laboratorio, se procederá a realizar la última fase de un estudio geotécnico. Es decir, la redacción del informe geotécnico final. Este informe contendrá, de manera detallada, el contexto geológico de la zona de estudio. Así como las propiedades geotécnicas y las recomendaciones constructivas y de diseño.
En el informe geotécnico final se podrá recomendar el tipo de cimentación más conveniente. Por ejemplo, si es recomendable utilizar pilotes o zapatas. Y suele tener el siguiente esquema:
- Introducción.
- Objeto.
- Descripción del proyecto.
- Trabajos realizados:
- Antecedentes:
- Cartografía geológico-geotécnica.
- Investigación geotécnica.
- Ensayos de laboratorio.
- Recomendaciones para la edificación.
- Recomendaciones preventivas ante posibles problemas geotécnicos que puedan ocurrir en el futuro en la zona estudiada.
¿Cuánto cuesta un estudio geotécnico?
Como hemos podido apreciar, un estudio geotécnico cumple una función importante para la edificación de un proyecto. Ya que, nos sirve para evaluar las propiedades geotécnicas del suelo de la parcela donde vayamos a construir.
El precio de un estudio geotécnico suele tener múltiples variables, como la superficie de la parcela, el área que se quiere construir o las características del edificio. De ahí que, lo mejor sea contactar con profesionales para obtener un presupuesto real.